La iglesia del Dulce Nombre de Jesús y Nuestra Señora de la Paz de Antequera (popularmente conocida como Santo Domingo) acogió la festividad de la advocación mariana el pasado viernes 24 de enero con una misa presidida por el carmelita Antonio Jiménez.
A las 20 horas comenzó la Eucaristía que se celebró en la nueva mesa de altar que realizó el artista Rafael Romero Pérez y que bendijo el obispo Jesús Catalá en la misa de clausura del congreso del Dulce Nombre. El sacerdote carmelita profundizó en la advocación de la Paz, algo tan necesario en nuestro día a día, donde las guerras y la violencia diaria se han apoderado de nuestro mundo.